Tal cual plantea Sainz de Vicuña
en su libro “Plan de marketing en la práctica”, el plan estratégico de empresa no es sino una profundización del plan
de marketing, dado que la pequeña empresa o empresa que recién está
surgiendo, nace con un fin principal ligado siempre al área de marketing.
Según Sainz de Vicuña, el pilar
básico de la estrategia general de la empresa viene definido por la estrategia
de posicionamiento y segmentación, así como la estrategia de cartera. Es así
como el plan de marketing se convierte en la guía de la planificación de los
emprendedores.
El fin principal de la nueva empresa es realizar un lanzamiento de un
producto o servicio innovador hacia una demanda insatisfecha, y obviamente,
vender para poder generar ingresos que haga la operación sostenible.
Según Sainz de Vicuña podemos
identificar 5 partes en la planificación
de marketing: análisis de la situación, diagnóstico de la situación, objetivos
de marketing, estrategias de marketing y plan de acción. El analizar y
aterrizar debidamente el plan de marketing contribuye notoriamente al éxito del
emprendimiento que se está lanzando. Esto último serán exactamente los que
revisemos en este post.
En este caso, la base principal del plan viene a ser el
análisis de la situación y su diagnóstico, que es la fase donde delimitamos
el rubro donde es mi deseo de comenzar mi emprendimiento. Una vez identificado
las líneas principales donde quiero trabajar, mapeo la situación del rubro, mediante
el cual se podrá identificar datos muy importantes para el negocio. Lo que
destacaría como datos muy importantes
en esta fase de análisis son, el nivel de demanda estimado que habría dentro
del sector en que nos movemos y también, identificar esta demanda concretamente
para el producto o servicio que brindamos. Al realizar todo el análisis del
entorno, también tendremos una mejor información de las necesidades del mercado
como para poder “pulir” mucho más esa idea inicial con la que probablemente
comenzamos el proyecto. No solo tendremos las necesidades actuales, sino que
también la idea es poder revisar las diferentes tendencias que se vienen, con el
fin de estar a la vanguardia y direccionar las acciones hacia este rumbo.
Estos dos puntos son muy
importantes y consisten en la base del negocio, ya que a través de la demanda estimada podremos después construir la sostenibilidad financiera.
Esto se hará en base a una demanda creciente del sector, con la idea de que el
negocio sea sostenible. Muy importante,
afinar la demanda del elemento no solamente hoy o este año, si no en los
próximos 5 años venideros.
Además, en base a las necesidades y tendencias, nos permitirá
obtener la diferenciación que vamos a lanzar al mercado, el posicionamiento y
estrategias de la empresa, así como desarrollar la “segunda fase” del negocio.
Cuando nos referimos a la segunda fase del negocio nos
referimos a que, considerando los recursos limitados que se tienen en cualquier
emprendimiento, lo ideal es cruzar las necesidades del mercado y plantear el
negocio no solo como un negocio lineal que debe sostenerse con el lanzamiento
del producto o servicio base, si no que después de 2 años de este lanzamiento principal
(hasta 3 años, dependiendo del negocio y la inversión) presentar un ampliación
del mismo.
Este segundo lanzamiento se puede realizar en base a un mayor alcance geográfico, el cual
incrementará también el número de demanda al incorporar mayor población, o
también se puede tomar este segundo lanzamiento como servicios o productos adicionales a lo que ya se venía presentando,
lo cual significaría mayor facturación con la misma proporción de la población
o llegar dentro del mismo ratio de influencia a otras personas con cierta demanda
insatisfecha que no llegaba a satisfacer el producto lanzado.
Por ello, para seguir brindando
más a los clientes actuales y ganar más clientes en término de cantidad, lo
ideal es plantearse el negocio en dos fases que permitan por un lado afianzar
la inversión base y después asegurar el crecimiento del negocio constituyendo
unos pilares más fuertes.
Esta primera parte del plan de
marketing de la empresa, se considera como el pilar del emprendimiento, ya que
es la que fortalece el perfil de la empresa haciéndola sostenible en el tiempo,
que es lo que todos queremos cuando nos embarcamos en esta aventura del
emprendedurismo. No pierdan de vista estos consejos, que les ayudarán a
aterrizar la practicidad del plan de marketing y a no dejarlo relegado a un
cajón, una vez terminado.