Estamos a 8 de enero 2016. Lo que más se puede ver en las redes son los balances del 2015 y los propósitos del 2016. Por mi lado, aqui podemos ver uno de mis propósitos del 2016: escribir más en mi blog.
¿Pero qué se debe hacer para poder cumplir todos estos propósitos del 2016 y no fallar en el intento? Todo está basado en la planificación, palabra diseñada para los negocios pero que hoy en día cada vez más se traslada al mundo personal, al del individuo. Yo soy de las que piensan que las personas pueden organizarse bajo varios criterios que manda la teoría organizacional de las empresas o instituciones, así como las empresas pueden ser gestionadas por el lado más humano de las organizaciones al estar conformada en su base por las personas. Con este principio, mi mente "vuela" en poder aplicar muchas teorías y estrategias, que pueden ser mixeadas tanto para un lado como para otro.
La Planificación de los propósitos del 2016 no iba a quedar atrás. Lo primero es marcar tu visión, ¿cuál es tu visión al 31 de diciembre del 2016 de ti mismo? Esto hará que nunca pierdas el rumbo, y que las acciones y sucesos que van ocurriendo en el camino no nos hagan desfallecer o perder nuestro norte. En mi caso sería ser una Blog lover, nuevo término que me acabo de inventar (como digo mi mente vuela), marketera de las redes o qué mejor, una influencer del marketing.
Lo siguiente es definir unos objetivos que se pueden ir cumpliendo en el corto plazo. En mi caso, podria ser escribir una vez a la semana en el Blog, definir un numero de visitas al blog y cuantas veces es compartido en la redes.
Una vez definido todo esto, necesitamos estrategias tácticas para poder llevarlas acabo. Táctica, acción, ¿como lo hago? El make it happen. Yo en mi caso, definiría mis motivaciones personales. Frases inspiradoras en el puesto de trabajo (para cuando te sientas, lo leas y sepas para qué estás ahi), recordatorios en la agenda, el outlook, no dejar pasar un día sin hacer XXX (algo que ayude a tu objetivo). Cuantas más acciones definamos que debemos hacer en la semana o en el día, más fácil será para nosotros identificar que lo que estamos haciendo contribuye al objetivo final.
Los propósitos del 2016 no se construyen solos, se construyen con un granito de arena cada día. Son cambios de hábitos, adquirir nuevas constumbres para poder llegar al objetivo. Y como buenos cambios de hábitos se necesita un proceso -en buena hora- ordenado, para conseguirlo. Una buena amiga me dijo una vez que esto es como manejar/conducir un auto: al principio debes coordinar en tu mente todas las acciones, cambios de marcha, mirar al espejo, cuidado con los peatones!, el semáforo.... y poco a poco tu mente se va programando hasta que llegua el momento en el que realmente manejas/conduces instintivamente mientras vas conversando con el copiloto.
Pues bien!, seamos conductores este 2016 y manejemos/conduzcamos nuestro propio carro, siguiendo nuestra planificación podremos concluir el 2016 con la lista de propósitos con más checks de haberlo cumplido que con esas telarañas que caracterizan el olvido.
A la Acción!
